miércoles, 3 de julio de 2013

Presentación.


Cultura Mexicana y Sociedad del Conocimiento.

Filosofía mexicana: entre lo abstracto y lo concreto.




Bienvenidos a este blog de consulta y de debate que lleva por nombre Cultura Mexicana y sociedad del Conocimiento, esperando que cumpla como una fuente de aprovechamiento y de intercambio de opinión para el estudiante del Colegio de Bachilleres.

Tu participación es muy importante al igual que la de tus compañeros, por lo cual, todos merecemos respeto a nuestras diversas opiniones.  Adelante.


“Si las puertas de la percepción se purificaran todo se le aparecería al hombre como es, infinito” 
                                                                                                    Aldous Huxley.

Ateneo de la Juventud Mexicana.


Ateneo de la Juventud Mexicana



El Ateneo de la Juventud Mexicana, más adelante conocido como el Ateneo de México, fue una asociación civil mexicana nacida el 28 de octubre de 1909 para trabajar por la cultura y el arte, organizando reuniones y debates públicos. Surgió como una vigorosa respuesta de una generación de jóvenes intelectuales quienes, en el ocaso del Porfirito, adelantan una serie de críticas al determinismo y mecanicismo del positivismo comtiano y spenceriano que alentó el modelo de desarrollo usado por Porfirio Díaz y el grupo conocido como los científicos. Los ateneístas, mediante una serie de conferencias y diferentes esfuerzos culturales, activaron una nueva conciencia reflexiva en torno a la educación.

Antecedentes.



Durante los últimos años del Porfirito, Justo Sierra pugnó por la creación del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, Porfirio Díaz accedió a su petición y lo nombró responsable del mismo, de esta forma, el sistema educativo se encaminó hacia la modernidad. Paralelamente un grupo de jóvenes lectores de Platón, Kant, Walter Pater, Friedrich Nietzsche, ÉmileBoutroux, Henri Bergson y de José Enrique Rodó deseaban un cambio del sistema, pues consideraban que las humanidades habían sido relegadas por la corriente positivista apoyada por el grupo de los científicos del gabinete presidencial.

En 1903 y 1904 se realizaron conferencias en la Escuela Nacional Preparatoria en las que participaron, a manera de lecturas literarias, Jesús Urueta, Amado Nervo y Luis G. Urbina, este hecho influyó a los futuros ateneístas que publicaron sus trabajos en la Revista Moderna, en la Revista Moderna de México y en la Savia Moderna.[1]

En febrero de 1907, en el marco de la celebración del primer aniversario de la Sociedad de Alumnos de la Escuela Nacional Preparatoria, se celebró una velada literaria, en esta ocasión asistieron el ministro Justo Sierra y el director Porfirio Parra. Destacó el discurso de "Alocución", de Alfonso Reyes Ochoa, el cual hablaba de la necesidad de equilibrio entre lo material y lo espiritual, haciendo una crítica a la corriente positivista a quien veía como una fórmula para reducir la conducta de las personas a fórmulas algebráicas. Durante ese año se realizó una manifestación en honor a Manuel Gutiérrez Nájera y el arquitecto Jesús T. Acevedo fundó la Sociedad de Conferencias.[2] De esta forma las reuniones se celebraron periódicamente en el Casino de Santa María, participaron Alfonso Cravioto, Antonio Caso, Pedro Henríquez Ureña, Rubén Valenti, Jesús T. Acevedo y Ricardo Gómez Robelo.

En marzo y abril de 1908 las conferencias se pronunciaron en el Conservatorio Nacional de Música añadiendo a éstas, interpretaciones musicales de Alba Herrera y Ogazón, Alberto Usrúa, Aurelio M. López, Manuel Tinoco y Carlos del Castillo. Participaron Antonio Caso, Max Henríquez Ureña, Genaro Fernández McGregor, Isidro Fabela y Rubén Valenti. Se realizó una manifestación a la memoria de Gabino Barreda y al apoyo de la Escuela Nacional Preparatoria, participaron el médico y político Francisco Vázquez Gómez, Pedro Henríquez Ureña, Ricardo Gómez Robelo, Alfonso Teja Zabre. En el Teatro Virgina Fábregas participaron Alfonso Cravioto, Rubén Valenti, Rodolfo Reyes Ochoa, Diódoro Batalla, e Hipólito Olea. En el Teatro Arbeu, Antonio Caso, el poeta Rafael López y Justo Sierra

Fundación.



El 28 de octubre de 1909 se fundó el Ateneo de la Juventud, sus reuniones se celebraron de forma cotidiana en la Escuela Nacional de Jurisprudencia. Las conferencias fueron patrocinadas por el secretario de Instrucción Pública Justo Sierra y el subsecretario de Bellas Artes Ezequiel A. Chávez. Hacia principios de 1910 eran miembros de la Ciudad de México, escritores, músicos, pintores, arquitectos, ingenieros, abogados, médicos y estudiantes, entre ellos destacaron : Jesús T. Acevedo, Roberto Argüelles Bringas, Antonio Caso, José Escofet, Isidro Fabela, Nemesio García Naranjo, Ricardo Gómez Robelo, Carlos González Peña, Pedro Henríquez Ureña, Alfonso Reyes Ochoa, Mariano Silva y Aceves, Alfonso Teja Zabre, Julio Torri y José Vasconcelos Calderón; entre los residentes externos estaban Max Henríquez Ureña, Efrén Rebolledo y Diego Rivera. A finales de ese mismo año se incorporaron Enrique González Martínez, Antonio MedizBolio y Martín Luis Guzmán. A iniciativa de Justo Sierra se fundó la Escuela Nacional de Altos Estudios y la Universidad Nacional de México.[4]

El Ateneo de la Juventud llegó a tener cerca de cien miembros, vivió hasta 1914. En septiembre de 1912, con un esfuerzo común de los integrantes del Ateneo, se creó la Universidad Popular Mexicana.

 

 

 

Visión.



Los miembros del Ateneo llamaron a dotar a la educación en México de una visión más amplia, que rechazará el determinismo biológico del racismo y que encontrará una solución al problema de los costos de los ajustes sociales generados por grandes procesos de cambio como la industrialización o la urbanización.

No sólo eso. Frente a la posición oficial del gobierno de Porfirio Díaz, y los científicos, llamados así de manera despectiva en el habla popular mexicana, José Vasconcelos y la generación del Ateneo promovieron una crítica de la visión única del pensamiento filosófico positivista y determinista. La generación del Ateneo propuso la libertad de cátedra, la libertad de pensamiento y, sobre todo, la reafirmación de los valores culturales, éticos y estéticos en los que América Latina emergió como realidad social y política. Aquí es importante destacar que una de las características más importantes del porfiriato es justamente el de su desdén por lo nacional mexicano, su fascinación con lo europeo, lo francés, lo alemán o, si nada de esto era posible, lo estadounidense, como única alternativa viable para alcanzar el progreso.

"Volved los ojos al suelo de México, a los recursos de México, a los hombres de México...a los que somos en verdad".

Antonio Caso.

Integrantes del Ateneo de la Juventud Mexicana.


Integrantes del Ateneo de la Juventud Mexicana.


 

 Antonio Caso Andrade.

Nace en la Cd de México el 19 de diciembre de 1883 y fallece el 6 de marzo de 1946. Filósofo mexicano y Rector de la Universidad Nacional de México de 1921 a 1923.

 Alfonso Reyes Ochoa.

Nace en la Cd de Monterrey el 17 de mayo de 1889 y fallece en Cd de México el 27 de diciembre de 1959. Poeta Ensayista y narrador conocido como el “regiomontano universal”.

 Pedro Henríquez Ureña.

Nace el 29 de junio de 1884 en la República Dominicana y fallece el 11 de mayo de 1946. Fue filósofo, escritor y maestro universitario en México de 1906 a 1913.

 

 Carlos González Peña.

Nace el 7 de julio de 1885 en Lagos de Moreno, Jalisco y fallece 1 de agosto de 1955 en la Cd de México. Fue escritor, pensador y periodista.

 José Escofet.

Nace y fallece en España de 1884 a 1944. Dramaturgo y escritor del reino de Navarra, España.

 José María Albino Vasconcelos Calderón.

Nace el 27 de febrero de 1882 y fallece el 30 de junio de 1959 en Oaxaca. Abogado, político y escritor. Fue el discípulo más comprometido con el estudio de la creación cultural de México y de Latinoamérica, en la Escuela  Nacional Preparatoria en el siglo XIX.

El Hiperión.


“El Hiperión y su tiempo”



 

El Hiparión fue un grupo de jóvenes profesores y alumnos de la Universidad Nacional Autónoma de México integrado por Emilio Uranga (1921-1988), Jorge Portilla (1918-1963), Luis Villoro (n. 1922), Ricardo Guerra (n. 1927), Joaquín Sánchez McGregor (n. 1925), Salvador Reyes Nevares (1922-1993) y Fausto Vega (n. 1922). Leopoldo Zea se une al grupo cuando éste elige como su tema de estudio a lo mexicano y, a partir de entonces, él se convierte en su principal organizador y promotor.

El Hiperión tuvo actividad pública de 1948 a 1952. Su presentación tuvo lugar en la primavera de 1948 con un ciclo de conferencias sobre el existencialismo francés. En el otoño de ese año imparten otras conferencias sobre los “Problemas de la filosofía contemporánea”. Ya sea sobre el tema de lo mexicano, organizan los siguientes encuentros: “¿Qué es el mexicano?” En 1949, “El mexicano y su cultura” en 1951, y “El mexicano y sus posibilidades” en 1952. El Hiperión publicó la mayoría de sus trabajos en la revista Filosofía y Letras de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM y en la colección de libros México y lo Mexicano, que se publicó entre 1952 y 1955 con el sello de Porrúa y Obregón. También aparecieron trabajos de los hiperiones en otras revistas académicas como Cuadernos Americanos y en los suplementos culturales más importantes de la época, como La Revista Mexicana de Cultura de El Nacional.

Conferencias.

Ellos son: “Jean Paul Sartre, filósofo de la libertad”, de Ricardo Guerra; “¿Hay una moral existencialista?”, de Joaquín Sánchez McGregor; “Descripción fenomenológica del relajo”, de Jorge Portilla; “La finura del mexicano”, de Salvador Reyes Nevares: “El accidente del mexicano” y “Carácter y ser del mexicano en la poesía de López Velarde”, de Emilio Uranga; “Soledad y comunión” y “Lo indígena como principio oculto de mi yo que recupero en la pasión”, de Luis Villoro; y “La filosofía como compromiso”, “La Revolución como conciencia de México” y “El mexicano como posibilidad”, de Leopoldo Zea.

 
 

Mitología de Hiperión origen Griego.



 

Fue uno de los 12 Titanes originales hijo del Dios Urano y la Diosa Gea, se casó con su hermana Theia o Tea, aunque titánide, es considerada la Diosa de la vista y del azul del cielo, y juntos fueron padres de los dioses del cielo: Helios (sol), Selene (luna) yEos (aurora)

Aunque tienden a unificarse padre e hijo, se diferencia de su hijo Helios, aparte de ser este un dios, a diferencia de su padre que es titán, Hiperión, no es el sol, sino el "dios" del fuego astral. También se considera el dios de la observación.

Sus hijos, al igual que su mujer, eran muy hermosos, y no solo eso, sino que eran muy virtuosos. Era lo que se conoce como "una familia feliz". Eso hizo que otro titanes, fueran cogiendo celos de la suerte que tenía Hiperión, por lo que empezaron a conspirar contra él. El propósito de estos, era el de matar al titán, ahogar a sus hijos y poseer a su esposa.

Y en parte lo consiguen. A Helios le lanzan a las aguas bravas del Eridano, y el dios, después de muchos intentos, acaba ahogándose. Su hermana gemela Selene, le produjo tal horror el presenciar la muerte de su hermano, que se acaba suicidando. Theia, se lanza a las aguas en un intento de salvar a su hijo. Después de infructuosos intentos, acaba desvaneciéndose por el cansancio, y en ese momento, se aparece su hijo y le explica que tanto él como Selene viven el Olimpo como dioses, y ambos, velaron por el bien de sus padres, y que nada malo les hicieran los otros titanes.

Hiperión fue uno de los cuatro hermanos que conspiraron junto con su hermano Cronos en la castración de Urano , y por ello, fue recompensado con ser uno de los pilares de la tierra, en concreto, es considerado la  columna del este. Sus hermanos Koios, Krios y Japeto presidien respectivamente, el norte, sur y oeste.